Afirmar que el consumismo está
extendido en nuestra sociedad, independientemente del poder adquisitivo que
tenga la familia es una realidad, quizás está cambiando un ápice por la
situación de crisis que estamos viviendo en nuestro país, hay muchos hogares en
los cuales no trabajan ambos padres, o uno de los dos está con reducción de jornada, o incluso
ambos en el paro, por lo que este consumismo exacerbado que estábamos viviendo
está teniendo un cierto freno.
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Imagen de www.pixelicia.com |
Si hacemos una comparativa con
las pertenencias que tenía un niño hace 40 años y las que tiene un niño de una
familia de clase media no tiene nada que ver……………..Se ha pasado de un par de
zapatos para los días de fiesta y otro para los días de labor a 7 u 8 pares en
total si no son más, solamente por poner un ejemplo. La publicidad en muchas ocasiones nos crea necesidades que no tenemos.
¿Por qué este cambio
generacional? ¿Ha sido por necesidad, o meramente por el aumento adquisitivo?
Podríamos nombrar muchas causas,
una es la ya mencionada, pero también hay otras como "no querer que
a mi hijo no le falte de nada", "que no sufra porque el otro tiene", esa tendencia
general a evitar el sufrimiento a los hijos, también porque en esa búsqueda de
querer hacer feliz a los niños consideramos que los regalos y el tener muchas
pertenencias es muy importante o esencial……pero dentro de los valores humanos y
de las necesidades vitales no se encuentra poseer miles de cosas.
¿Qué se les transmite a los niños
cuando se les compra todo aquello que piden?
Es cierto que hay muchos niños
que consiguen todo o casi todo lo que piden, a través de peticiones, ruegos, y
sino se sirven pataletas, insistencias, mediante comparaciones con sus compañeros………..y
esto se convierte en una espiral de la cual es muy difícil salir, donde la
autoridad y la firmeza del adulto se pone en juego. El mensaje que se les está
transmitiendo, al concederles todo lo que desean, es que las cosas se pueden conseguir sin esfuerzo, por lo que
tienden a no valorarlas lo suficiente o a dejarles de interesar al poco tiempo.
¿Entonces dónde se encuentra el
equilibrio?
Es importante tener claro, por un lado, qué es una necesidad y por otro, qué son los regalos y los premios. Los
artículos que son una necesidad consideramos que no es necesario describirlos,
si se le rompen unas deportivas y no se pueden arreglar, se le sustituyen por otras. Los regalos se realizan en situaciones y
fechas especiales y no cuando el niño los pide, en cumpleaños, reyes, cuando se
está enfermo... Los premios son pequeños
objetos (pegatinas, cuentos, abalorios para hacer pulseras, un libro para
pintar….) que el niño lo consigue cuando a adquirido una conducta adecuada
durante un tiempo determinado.
¿Cómo podríamos concluir este
tema?
Es fundamental enseñar y aprender
a vivir en cada familia con las posibilidades que se tienen, transmitir a los
hijos unos valores propios no los que nos dicta esta sociedad, no tener miedo a
ser diferente, ni tampoco a ir contra corriente, disfrutar con las
cosas más pequeñas y sencillas …………. teniendo en cuenta que no hay nada material que pueda sustituir al afecto, la
compañía, los encuentros familiares, compartir, reírnos en compañía,
jugar al escondite…..
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